Diálogo de materiales, juegos de colores y detalles que crean elegancia. Una colección de muebles que reinterpreta la experiencia del bienestar con un ambiente cálido y refinado.
Diálogo de materiales, juegos de colores y detalles que crean elegancia. Una colección de muebles que reinterpreta la experiencia del bienestar con un ambiente cálido y refinado.
Cuando descubrí el trabajo de Sarah Lavoine, me di cuenta de que había conocido a una diseñadora con un enfoque refinado pero revolucionario, muy parisino. Es una revolución hecha de combinaciones de colores inusuales, líneas sinuosas y una estética que hace que la experiencia en el salón sea extremadamente agradable: un momento de relajación en un entorno elegante y acogedor donde cuidarse.
Sarah Lavoine creó su estudio de diseño de interiores en 2002.
Desde el principio, sus clientes reconocieron su talento innato y su capacidad para transformar los espacios. Trabajando en una amplia variedad de proyectos, desde casas privadas (casas, lofts, apartamentos), hasta espacios públicos (hoteles y restaurantes), rápidamente se forjó fuertes convicciones sobre el uso del espacio, la luz y el color. Su estilo característico también incorpora una mezcla de estilos y orígenes, elegancia y confort, es la encarnación de un espíritu parisino cosmopolita.